martes, julio 31, 2012

lenguas de pueblos originarios de México en su tránsito a la sobreviviencia o la extinción

Hace 200 años se creó un nuevo país que se dijo a sí mismo que sería democrático y multicultural. Pero del dicho al hecho hay mucho trecho. Esas ideas todavía siguen siendo una utopía. La brecha entre el discurso y la realidad es todavía muy amplia. Muchas de las lenguas de los pueblos originarios de México tienen grandes posibilidades de desaparecer de la cultura viva. La insistencia por construir "una nación" tratando de sintetizar varios dilemas: castellano vs lenguas originarias; poder centralizado vs federalismo; imperio mexicano vs sociedad democrática; religión católica vs ciencia. En pocas palabras siglo XIX vs siglo XVI. Según los resultados actuales, buena parte de la sociedad mexicana sigue defendiendo las ideas del siglo XVI. El problema consiste en que el siglo XXI será para las sociedades que ya viven en el siglo XX y están en tránsito para las sociedades del conocimiento. ¿Tendrán cabida las lenguas de nuestros pueblos originarios o quedarán en un museo como cultura del pasado? 

Con unos 100 años de retraso hay un proyecto para traducir el cine mexicano a las lenguas originarias:

Películas de la talla de Como agua para chocolate serán traducidas a lenguas indígenas. Ya hay una sala en Guachochi, en Chihuahua, donde hay una fuerte presencia rarámuri y hay pláticas para montar en Nochixtla, Oaxaca, para proyectarlas. El cineasta Alfonso Arau (Zapata, el sueño del héroe) está al frente del proyecto llamado Cidilux. Ya se trabaja, informó, con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artyes, así como con el Instituto Mexicano de Cinematografía. “Lo que queremos hacer es regalarle a cada comunidad indígena su cine, entonces estamos trabajando para tener un grupo de películas nacionales, que estamos definiendo, para con cierto presupuesto doblarlas a las lenguas. “Es darles cine con nuestro modelo (de producción), pero sus propios rituales; hay muchísimo material que tiene por ejemplo la Comisión de Desarrollo de Pueblos Indígenas, con un acervo impresionante”. Agregó que su éxito Como agua para chocolate, que acaba de cumplir 20 años de haber sido estrenada, podría entrar en el paquete de exhibición. “Me encantaría eso, es algo que va caminando”.

Y es que 200 años no es nada, los niños y adolescentes que pertenecen a nuestras comunidades originarias siguen obligados a vivir en el siglo XVI:

Niños y adolescentes indígenas en México presentan rezagos mayores, que llegan a ser severos o extremadamente altos, ante los de sus similares de otros países de América Latina en el acceso a una vivienda digna, agua potable, educación e información. Así lo revela un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) sobre la pobreza en los pueblos indígenas y afrodescendientes en la región latinoamericana. México concentra el mayor porcentaje de población infantil indígena entre 17 naciones analizadas con 2 millones 733 mil menores que representan 21.3 por ciento del total regional, calculado en 12 millones 814 mil infantes de 700 etnias diferentes. Así que, uno de cada cinco niños indígenas en América Latina es mexicano. Después de México, Perú es la segunda nación con más población infantil indígena en la región al concentrar 20.2 por ciento del total, le sigue Guatemala con 19 por ciento y Bolivia con 17.4 por ciento. El documento puntualiza que en las comunidades indígenas hay más niños que adultos y en México representan 45 por ciento, por encima del promedio regional y también de la composición general de la población donde sólo 37 por ciento son menores de 18 años. Además 68.6 por ciento de los infantes indígenas de México viven en zonas rurales, cuando el promedio regional es de 61 por ciento. La mayor privación que detectan Cepal y Unicef entre los niños indígenas es en su derecho a la información, definida como la libertad de buscar, recibir y difundir información e ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito, de forma impresa o artística, o por cualquier otro método. Su cumplimiento debe incluir el acceso al equipamiento necesario como teléfonos, computadoras o televisores y se considera condición necesaria para que los pueblos indígenas y afrodescendientes puedan ejercer todos sus derechos humanos. En México, la privación en información entre los menores indígenas es de 95.4 por ciento –desglosada en 28 por ciento como privación severa y 67.4 por ciento privación moderada–, pero que sube hasta 98 por ciento entre quienes viven en zonas rurales.

200 años después, las comunidades originarias tienen que enfrentar a los gobiernos federales o estatales para que éstos cumplan los preceptos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos:

En lo que se considera una decisión judicial sin precedentes, el juez primero de distrito con sede en Chilpancingo, Guerrero, admitió una demanda de amparo interpuesta por la comunidad me’phaa de Buena Vista, municipio de Atlixtac, para hacer que las autoridades educativas de la entidad construyan en el pueblo un centro prescolar indígena. El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan informó que por casi 10 años Buena Vista ha presentado múltiples solicitudes a la Secretaría de Educación de Guerrero para que instale un colegio para cerca de 30 niños de entre tres y seis años de edad. En esa región se presenta uno de los índices más altos de rezago educativo, pues los menores deben caminar más de seis kilómetros para llegar a la escuela. A pesar de que la comunidad ya construyó el inmueble con recursos propios y trabajo comunitario, las autoridades de Guerrero han ignorado sus peticiones. Este proceso legal, señaló Tlachinollan, no sólo es el último recurso legal con que cuentan los niños de esta comunidad para acceder a la educación, sino también pone a prueba las recientes reformas sobre amparo y derechos humanos.

Y por alguna bizarra situación, el subsistema de educación indígena sigue siendo uno de los más olvidados por las secretarías de educación federal y estatales:

La Secretaría de Educación Publica (SEP) detectó que más de 50% de los maestros bilingües, quienes prestan sus servicios en las zonas indígenas de Guerrero, carecen de documentación oficial que valide su preparación académica, “muchos de ellos apenas y han podido acreditar su bachillerato”, reveló. El representante de la SEP en Guerrero, César Quevedo Inzunza, informó que a través de un diagnóstico que se realizó en coordinación con el gobierno del estado se logró detectar esta anomalía. El funcionario federal explicó que Guerrero tiene una plaza de 72 mil maestros, de éstos, siete mil corresponden a educación bilingüe. De acuerdo a los datos aportados, unos 4 mil 300 maestros bilingües carecen de un título. Aclaró: “Buena parte tienen deficiencias de carácter documental, mas no de experiencia o capacidades intelectuales, pues en su mayoría han tenido un buen desarrollo frente al grupo que les ha sido asignado”. César Quevedo Izunza dijo que “producto del devenir histórico se permitió el ingreso de docentes con deficiencias de carácter académico, sobre todo en la región de la Montaña y las zonas indígenas, porque en esas zonas se complica la contratación con todos los requisitos que exige la norma”. Ejemplificó que este año, en la región de la Montaña, zona catalogada como de mayor rezago educativo en el país, siete escuelas primarias cerraron, porque los maestros las abandonaron sin justificación aparente. Resaltó que en otros casos los maestros tienen más de 20 años de servicio frente a un grupo, pero nunca buscaron la oportunidad de terminar su preparación académica. “Laboralmente resulta imposible despedirlos para contratar otros docentes titulados y con la preparación académica requerida”. En todo caso, “el responsable es quien los contrató y ellos son parcialmente culpables por no tomar en cuenta las necesidades de un futuro no lejano”, comentó. Resaltó la importancia del escaneo general al sector educativo para detectar los rezagos y las condiciones de preparación de cada docente.

No debe extrañar, entonces, que la investigación social en México también se encuentre atascada en el siglo XVI. Con retraso de 200 años se crea el primer laboratorio de documentación y análisis lingüístico de México:

El primer laboratorio especializado de documentación y análisis lingüístico del país será creado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Contará con la posibilidad de realizar registros sonoros del habla y análisis científicos de las lenguas en peligro de extinción en todo el país, explicó Francisco Barriga Puente, coordinador nacional de Antropología. El laboratorio comenzaría a trabajar con el grupo de lingüistas del INAH, quienes tienen como tarea principal la fonología y descripción de las lenguas indígenas. En este laboratorio se producirá inventarios fonológicos, y se estudiarán los procesos morfológicos e idiosincráticos de cada individuo y comunidad, los cuales serán medidos y graficados, destacó. Es decir, se levantarán muestras sonoras de las lenguas para su documentación. Estas grabaciones servirán para el futuro porque contarán con un alto nivel de calidad, y paralelamente se trabajará en diversas investigaciones. “Será un espacio que permitirá a los lingüistas no sólo el registro documental de las lenguas y sus variantes, sino también el análisis de toda su producción”. “Y es que según la opinión de algunos colegas, ante la inminencia de la desaparición de muchas lenguas lo procedente es registrarlas, documentarlas. E irá acompañado de un análisis científico, cualitativo, cuantitativo, de estas lenguas en su dimensión física”, dijo. Se sabe que existen las grabaciones de Thomas Stanford en la Fonoteca Nacional, ¿serán integradas a este trabajo? Hay una cantidad de registros que realizaron antropólogos y lingüistas. Algunos cobran un valor mucho mayor en la actualidad puesto que son variantes de lenguas o lenguas ya perdidas. Pero gran parte del problema consistiría en digitalizar ese material, aunado a que a veces se trata de grabaciones de muy mala calidad.

Esa idea poco sustentada de que las lenguas de nuestros pueblos originarios eran exclusivamente orales, apenas es puesta en duda por los investigadores mexicanos.... unos 200 años de atraso, más o menos, revisando el trabajo realizado por un ruso:

Desciframientos de Knórosov marcaron un hito en la historia de la investigación A partir de la obra “Relación de las Cosas de Yucatán”, en la que fray Diego de Landa asentó un silabario del sistema maya, los epigrafistas han podido descifrar los jeroglíficos de esta cultura, aseguró el arqueólogo Guillermo Kantún Rivera. Rivera señaló que en el citado silabario quedaron las equivalencias fonéticas de las letras españolas en signos mayas. “Esto es muy importante porque durante años fue imposible descifrar esta escritura prehispánica debido a que los estudiosos pensaban que De Landa había dejado un abecedario e incluso que los jeroglíficos eran ideogramas sin sonido”. Por muchos años, los epigrafistas pensaron que el trabajo de fray Diego de Landa había falseado la escritura maya, hasta que el lingüista ruso Yuri Valentinovich Knórosov, en 1952, se dio cuenta de la naturaleza fonética del sistema y propuso que el fraile recopiló un silabario y no un abecedario. Kantún explicó que para ese momento los epigrafistas no entendían que el sistema maya utiliza sílabas para su escritura; fue hasta que Yuri Knórosov le dio valor a éstas y así descifraron varios aspectos de su estructura. El especialista en epigrafía resaltó que un solo sonido o una sola sílaba puede tener cinco, 12 o 13 variaciones de símbolos, en tanto que los escribas mayas crearon ingeniosas combinaciones gráficas en busca de lograr obras más bellas y completas sin repetirse a sí mismas. Lo anterior, dijo, significa que en el sistema de escritura maya existen muchas formas de escribir una sola cosa. Por otra parte, destacó que los textos preclásicos aún no pueden leerse, porque no existen ejemplos suficientes de la escritura de la época a partir de los cuales hacer comparaciones. No obstante, aseguró, los jeroglíficos que datan de finales de los periodos Clásico Temprano (200 - 600 d.C.) y Clásico Tardío (600 – 900 d.C.), ahora son más claros o de más fácil lectura para los epigrafistas. Kantún explicó que existen dos tipos de signos: las imágenes que representan sílabas y las que representan palabra completas; y que éstas pueden combinarse de manera distinta para crear variación visual dentro de un texto. Los estudios mayas siempre se han nutrido de lo que los informantes tienen que decir, siendo por mucho tiempo los chicleros, usualmente de habla maya, la fuente de información sobre la ubicación de sitios arqueológicos escondidos en la selva, explicó el experto.

Mientras que la academia mexicana parece exagerar su parsimonia, el siglo XXI utiliza las nuevas tecnologías para evitar la desaparición de la diversidad lingüística:

La extinción masiva de las lenguas es un problema que enfrenta la sociedad mundial, por ello, Google lanzará el proyecto "Lenguas en Peligro", que permitirá a los usurarios conocer toda la información existente sobre este patrimonio cultural. El proyecto pretende rescatar las aproximadamente siete mil lenguas que hay en el mundo en peligro de desaparición, permitirá compartir las mejores prácticas y estudios de casos a través de una sección de intercambio de conocimientos. Esta iniciativa busca guiar a los cibernautas en el campo de la preservación de las lenguas de la mano de expertos en la materia. A través de la página electrónica endangeredlanguages.com, los usuarios podrán acceder a la información más actualizada y completa sobre los idiomas en peligro de extinción, y desempeñar un papel activo en la puesta en línea de sus lenguas mediante las muestras en forma de texto, archivos de audio y video. De acuerdo con la información del propio portal, creado por Google, la aplicación es supervisada por el Consejo de los Primeros Pueblos Culturales y los Institutos de Información y de Tecnología de Lenguaje de la Eastern Michigan University, en Estados Unidos.

¿Estás interesado en preservar las lenguas de nuestros pueblos originarios? No esperes a que la sociedad mexicana que sigue viviendo en el siglo XVI cambie, tienes dos opciones: a) crear una red social de amigos y familiares para armar un proyecto que use las lenguas vivas; b) participar en el proyecto de google. El cambio cultural se realiza cuando las personas vivas de una sociedad cambian y se viven los valores.  Los valores impresos y en los discursos no han logrado cambiar nuestra mentalidad del siglo XVI.




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